La inteligencia artificial en el sector inmobiliario (y en muchos otros sectores productivos) ha tenido un gran impacto en los últimos años. El desarrollo de numerosas herramientas estadísticas y de análisis han facilitado el acceso a la información para optimizar procesos y conseguir mejores resultados.
Actualmente el futuro más inmediato del sector está centrado en los avances tecnológicos y en la digitalización. Pero, ¿cómo se puede utilizar la inteligencia artificial en el sector inmobiliario?
¿Qué aplicaciones tiene la inteligencia artificial en el sector inmobiliario?
Son muchas las organizaciones que ya implementan tecnologías innovadoras para mejorar el acceso a la información y su posterior análisis.
Estas herramientas de aprendizaje automático (o machine learning) y modelos predictivos pueden ayudar a usuarios y profesionales a tomar decisiones más racionales e informadas y, en consecuencia, a conseguir resultados más positivos. Analizan y sintetizan un gran volumen de información de numerosas fuentes de forma transparente y racional, eliminando el sesgo personal.
Por tanto, una de las aplicaciones más utilizadas de la inteligencia artificial en el sector inmobiliario son herramientas que facilitan la búsqueda de activos por atributo. Esto permite filtrar con gran precisión los resultados más interesantes para cada usuario teniendo en cuenta las características y necesidades individuales: ubicación, precio, tamaño…
Al tener acceso a este gran volumen de datos, algunas herramientas también permiten utilizar datos históricos para predecir la evolución de los precios de las viviendas y las posibilidades de crecimiento detectando carencias, prediciendo evaluaciones y valores de mercado.
Relacionado con esto, la inteligencia artificial en el sector inmobiliario también puede servir para analizar el ahorro energético y la seguridad de los hogares monitorizando los sistemas de control. De esta forma se pueden instalar sistemas inteligentes de calefacción e iluminación que muestren el potencial de ahorro mediante el almacenamiento de datos de consumo y costes. También ofrece la posibilidad de generar modelos virtuales que reflejan con precisión los resultados de una rehabilitación física para anticipar los resultados y reducir costes.
Una de las aplicaciones de la inteligencia artificial que generalmente provoca más inquietud es la posibilidad de automatizar tareas repetitivas. Los chatbots y asistentes virtuales pueden ayudar a responder de forma rápida y ágil las preguntas de los clientes, por ejemplo.
Siguiendo esta línea también se han desarrollado numerosas plataformas de realidad virtual para que los usuarios interesados puedan visitar las propiedades sin necesidad de salir de casa. Esto puede reducir la necesidad de visitas físicas y aumentar la eficiencia en el proceso de compra.
¿Plantea algún tipo de desafío?
Aunque la inteligencia artificial está revolucionando el sector inmobiliario, todavía queda mucho para consolidarla y desarrollar todas las posibilidades que ofrece.
Sin duda uno de los mayores desafíos que presenta es la programación de los sistemas que permiten la lectura y evaluación automática de los datos. Y, a la vez, proteger la seguridad y privacidad de todos los datos que almacena y analiza. No cabe duda de que es necesaria mano de obra altamente cualificada para desarrollar soluciones de inteligencia artificial fiables y prácticas.
Este gráfico extraído de una encuesta del Instituto Nacional de Estadística muestra con datos del primer trimestre de 2022 el porcentaje de empresas con 10 o más empleados que emplean tecnologías de inteligencia artificial por agrupación de actividad económica en los sectores de industria, construcción y servicios clasificándolo por comunidades y ciudades autónomas.
En comparación con el total de sectores (columnas azules) las que pertenecen al sector de la construcción (columnas marrones) tienen porcentajes de aplicación de estas tecnologías muy inferiores. Destacan la Comunidad Valenciana y Castilla-La Mancha, cuyos porcentajes en el sector de la construcción son muy superiores a la media nacional. Por el contrario, regiones como Cataluña o Madrid todavía tienen mucho margen de crecimiento por delante.
El sector inmobiliario y la sociedad en general evoluciona continuamente y es necesario adaptarnos y permanecer dinámicos para no quedarnos atrás. Ahora solo falta esperar para ver cómo evoluciona y se implementan y consolidan sus posibilidades.